1. Estás obsesionado con hacerte rico. 2. Nunca tienes suficiente. 3. Estás viviendo más allá de tus posibilidades. 4. Te estás convirtiendo en un espectáculo. 5. Te caracterizas por la codicia. 6. Has olvidado la fuente. 7. Sus lealtades están divididas. 8. Estás tentado a pecar. 9. Tu vida está empezando a sufrir. 10. Te preguntas si necesitas consejo.