1. Reconoce que Dios te creó para una relación personal. 2. Considera tus motivos para querer escuchar de Dios. 3. Haz tu objetivo más que solo escuchar a Dios. 4. Sepa que usted es importante para Dios, pero sea humilde. 5. No intentes obligar a Dios a decirte algo. 6. Reconoce que Dios se comunica en muchas formas. 7. Renueva tu mente. 8. Invita a la Palabra viva a que te ayude cuando leas las Escrituras. 9. Reconoce la voz de Dios por encima de todas las demás. 10. Dedique tiempo regularmente para escuchar los mensajes de Dios.